El concejal de Participació Ciutadana, Alberto Jarabo, concretó este miércoles que los puntos más conflictivos se encuentran en sa Llonja, Santa Catalina o la Platja de Palma, «que coinciden con aquellas donde hay una mayor concentración de locales».
Tras la denuncia realizada hace unos días por parte de la Federació d'Associacions de Veïns de Palma (FAAVV) por la «situación de emergencia» que se ha generado desde el final de estado de alarma «en el que la impunidad es la norma y algunos propietarios de bares y restaurantes hacen lo que quieren», Jarabo reconoció que «ya sabíamos que la situación sería complicada este verano y estamos viendo que hay excesos».
Ante ello, el responsable municipal aseguró que «se están levantando muchas más sanciones en este sentido que antes del verano» por parte de la Policía Local y los inspectores del área de Govern Interior, si bien no concretó la cifra.
«La clave es el civismo», declaró el edil, quien insistió en Cort trabaja en la regulación de estos excesos.